Royaume d'Espagne

Espagne

Décret royal 489/1997 du 14 avril relatif à la publication des lois
dans les langues co-officielles des Communautés autonomes

La présente version française du Décret royal 489/1997 du 14 avril relatif à la publication des lois dans les langues co-officielles des Communautés autonomes (Real decreto 489/1997, de 14 de abril, sobre publicacion de las leyes en las lenguas cooficiales de las comunidades autonomas) a été traduite de l'espagnol par Jacques Leclerc; ce texte ne saurait avoir qu'une valeur informative.

Real decreto 489/1997, de 14 de abril, sobre publicacion de las leyes en las lenguas cooficiales de las comunidades autonomas

El artículo 3 de la Constitución Española dispone que el castellano es la lengua española oficial del Estado, y que todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho a usarla. Este mismo precepto constitucional establece que las demás lenguas españolas serán también oficiales en las respectivas Comunidades Autónomas, de acuerdo con sus Estatutos.

De conformidad con estos principios constitucionales, nuestro ordenamiento  jurídico contempla, en diferentes disposiciones legales, la utilización de las lenguas oficiales de las diversas Comunidades Autónomas, tanto en las relaciones entre la Administración y los ciudadanos como en las relaciones jurídico-privadas. Así, el artículo 231 de la Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio, del Poder Judicial, regula la utilización de cualquiera de las lenguas oficiales dentro de la Comunidad Autónoma, en todas las actuaciones judiciales, siempre y cuando no se produzca indefensión, y el artículo 36 de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, permite que los interesados elijan la lengua oficial en la que se tramitará el procedimiento ante los órganos de la Administración General del Estado radicados en la correspondiente Comunidad Autónoma.

En aplicación de los principios constitucionales expresados y en armonía con las pautas legales, antes reseñadas, parece aconsejable difundir y extender el conocimiento de la legislación del Estado mediante la utilización de aquellas otras lenguas que también tienen el carácter de oficiales en las diferentes Comunidades Autónomas.

Esta medida debe ser compatible, por elementales razones de seguridad jurídica, con el principio de univocidad del Derecho.

Dada la remisión expresa que la Constitución hace a los Estatutos de Autonomía como garantes de las lenguas oficiales de las diferentes Comunidades Autónomas, se considera conveniente facilitar la cooperación de éstas con la Administración General del Estado en todas las cuestiones relativas a la traducción, edición y distribución de los textos legales vertidos en las correspondientes lenguas  vernáculas. A tal efecto, se contempla la posibilidad de suscribir convenios de
colaboración, al amparo de lo establecido en el artículo 6 de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común.

Debido a las dificultades objetivas que entraña la publicación de las disposiciones de carácter general en diferentes lenguas oficiales, se ha considerado prudente limitar inicialmente la medida al ámbito de las normas con rango de Ley. Contrastada esta primera experiencia, podrá considerarse la posibilidad de extender la medida a otras disposiciones de carácter reglamentario.

En su virtud, a propuesta del Vicepresidente Primero del Gobierno y Ministro de la Presidencia y previa deliberación del Consejo de Ministros en su reunión del día 4 de abril de 1997,

DISPONGO :

Artículo 1.

1) Las Leyes, los Reales Decretos-leyes y los Reales Decretos legislativos, una vez sancionados por el Rey, serán publicados en castellano en el «Boletín Oficial del Estado», a efectos de lo previsto en el artículo 2.1 del Código Civil, derivándose, en consecuencia, de dicha publicación su plena eficacia, a tenor de lo previsto en el título preliminar del Código Civil.

2) Las disposiciones generales a que se refiere el apartado anterior podrán ser también publicadas en las demás lenguas oficiales de las diferentes Comunidades Autónomas, con arreglo a lo dispuesto en el artículo siguiente del presente Real Decreto, si así lo decidieran los órganos competentes de las respectivas Comunidades.

Artículo 2.

1) En el marco de lo establecido en el artículo 6 de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, el Gobierno de la Nación y los Órganos de Gobierno de las Comunidades Autónomas podrán suscribir convenios de colaboración a fin de cooperar en la traducción, edición y distribución de las publicaciones a que se refiere el apartado 2 del ar tículo 1 del presente Real Decreto.

2) La publicación de dichas disposiciones generales podrá efectuarse en el  «Boletín Oficial del Estado» o en el Boletín propio de la Comunidad Autónoma, en los términos y plazos que se establezcan en el convenio de colaboración al que hace referencia el apartado 1 de este artículo.

Disposición adicional única

A efectos del ámbito de aplicación del presente Real Decreto, los convenios de colaboración previstos en el apartado 1 del artículo 2 podrán contemplar la posibilidad de incluir otras disposiciones de carácter general, a partir de los seis meses de la entrada en vigor del convenio.

Disposición final primera

Los presupuestos del Organismo autónomo Boletín Oficial del Estado se adaptarán a las previsiones contenidas en este Real Decreto.

Disposición final segunda

El presente Real Decreto entrará en vigor el día siguiente al de su publicación en el «Boletín Oficial del Estado».

Dado en Madrid a 14 de abril de 1997.

Juan Carlos Rey de España

El Vicepresidente Primero del Gobierno
y Ministro de la Presidencia,

FRANCISCO ÁLVAREZ - CASCOS FERNÁNDEZ

Décret royal 489/1997 du 14 avril relatif à la publication des lois dans les langues co-officielles des Communautés autonomes

L'article 3 de la Constitution espagnole dispose que le castillan est la langue espagnole officielle de l'État, et que tous les Espagnols ont le devoir de la connaître et le droit d'utiliser. Ce même précepte constitutionnel établit que les autres langues espagnoles sont aussi officielles dans leurs Communautés autonomes respectives, en accord avec leurs Statuts.

Conformément à ces principes constitutionnels, notre ordre juridique considère, au moyen de différentes dispositions juridiques, l'usage des langues officielles des diverses Communautés autonomes, tant dans les relations entre l'Administration et les citoyens que dans les rapports juridiques privées. Ainsi, l'article 231 de la Loi organique 6/1985 du 1er juillet relative au pouvoir judiciaire, réglemente l'usage de chacune des langues officielles dans la Communauté autonome, dans toutes les activités judiciaires, à condition qu'un manque de défense ne se produise pas, et l'article 36 de la loi 30/1992 du 26 novembre relative aux bases du régime juridique des administrations publiques et de la procédure administrative, permet aux personnes concernées qui choisissent la langue officielle dans laquelle la procédure se déroule devant les organismes de l'Administration générale de l'État établis dans la Communauté autonome correspondante.

En application des principes constitutionnels exprès et en harmonie avec les règles juridiques, devant les faits historiques, il paraît recommandable de diffuser et d'étendre la connaissance de la législation de l'État par l'usage des autres langues qui ont aussi le caractère d'officialité dans les différentes Communautés autonomes.

Cette mesure doit être compatible, pour des raisons élémentaires de sécurité juridique, avec le principe d'univocité du droit.

Vu le renvoi exprès de la Constitution concernant les Statuts d'autonomie comme garant des langues officielles des différentes Communautés autonomes, elle est considéré comme nécessaire de faciliter la coopération de celles-ci avec l'Administration générale de l'État pour toutes les questions relatives la traduction, la publication et la distribution des textes juridiques utilisés dans les langues vernaculaires correspondantes. À cet effet, il est considéré possible de souscrire à des accords de collaboration, conformément aux dispositions prévues à l'article 6 de la loi 30/1992 du 26 novembre relative au régime juridique des administrations publiques et de la procédure administrative commune.

Étant donné les difficultés objectives qu'entraîne la publication des dispositions à caractère général dans les différentes langues officielles, il a été considéré prudent de limiter initialement la mesure dans le cadre des règles avec rang de loi. À partir de cette première expérience, il pourra être possible d'étendre cette mesure à d'autres dispositions à caractère réglementaire.

De par son pouvoir, sur proposition du premier vice-président du Gouvernement et le ministre la Présidence et sur délibération préalable du Conseil des ministres lors de son assemblée du 4 avril 1997 :

J'ORDONNE :

Article 1er

1) Les lois, décrets-lois et arrêtés législatifs royaux, une fois sanctionnés par le roi, sont publiés en castillan dans le Bulletin officiel de l'État, en ce qui concerne les dispositions prévues à l'article 2.1 du Code civil, en étant par conséquent tirés de cette publication sa pleine efficacité, d'après les dispositions prévues dans le titre préliminaire du Code civil.

2) Les dispositions générales auxquelles se réfère le paragraphe précédent peuvent aussi être publiées dans les autres langues officielles des différentes Communautés autonomes, conformément aux dispositions de l'article suivant du présent royal arrêté, ainsi qu'en ont décidé les organismes compétents des Communautés autonomes respectives.

Article 2

1) Dans le cadre des dispositions prévues à l'article 6 de la loi 30/1992 du 26 novembre relative aux bases du régime juridique des administrations publiques et de la procédure administrative, le gouvernement de la Nation et les organismes du gouvernement des Communautés autonomes pourront souscrire des accords de collaboration afin de coopérer dans les secteurs de la traduction, de la publication et de la diffusion des publications auxquelles réfère le paragraphe 2 de l'article 1 du présent royal arrêté.

2) La publication de ces dispositions générales peut être effectuée dans le Bulletin officiel de l'État ou dans le Bulletin propre de la Communauté autonome, dans les termes et les délais qui sont établis dans la convention de collaboration à laquelle fait référence le paragraphe 1 du présent article.

Disposition additionnelle unique

En ce qui concerne le cadre d'application du présent arrêté royal, les accords de collaboration prévues au paragraphe 1 de l'article 2 peuvent considérer la possibilité d'inclure d'autres dispositions à caractère général, dans un délai de six mois à partir de l'entrée en vigueur de l'accord.

Première disposition finale

Les budgets de l'organisme autonome du Bulletin officiel de l'État s'adapteront aux prévisions contenues dans le présent arrêté royal.

Seconde disposition finale

Le présent royal arrêté entre en vigueur le jour suivant sa publication dans le Bulletin officiel de l'État.

Donné à Madrid le 14 avril 1997.

Juan Carlos, roi d'Espagne,

Le vice-président, le premier ministre-président du Gouvernement
et le ministre de la Présidence,

FRANCISCO ÁLVAREZ - CASCOS FERNÁNDEZ


 

 Page précédente

 

État espagnol


 

Accueil: aménagement linguistique dans le monde